La sala de espera es un espacio fundamental en una amplia gama de negocios: dentistas, centros de estética, clínicas médicas, estudios de tatuajes, Despachos de abogados y así multitud de pymes.
La sala de espera es un espacio importante ya que es la primera toma de contacto entre el cliente (o cliente potencial) y la empresa, por lo que es necesario cuidar todos los detalles, desde la disposición hasta la decoración.
Cómo crear una sala de espera ideal
La sala de espera, si el espacio lo permite, es mejor ubicarla al inicio, cerca de la entrada a las instalaciones.
Esto se aconseja para que el cliente no tenga que atravesar todo el local hasta llegar a la sala, pero si por razones de espacio no se puede, ¡no hay problema! En esos casos es importante indicar bien dónde se encuentra y que el camino hasta la sala de espera esté bien cuidado y sea intuitivo llegar hasta ella.

Comodidad, iluminación y decoración
Los clientes pasarán el tiempo suficiente en la sala de espera, por lo que hay que emplear mobiliario cómodo.
Es recomendable utilizar muebles cómodos como butacas, sillones y sillas contract. Se trata de muebles de recepción que además de cómodos son elegantes y con una variedad de estilos que hace que se adapten a cada estilo de empresa.
En cuanto a las mesas, dependiendo de lo grande que sea la sala, se ponen una o dos mesas pequeñas de estilo moderno. Las mesas en las salas de espera hacen más de decoración, pues los clientes no van a trabajar en ellas, pero se pueden poner revistas o libros para que puedan entretenerse mientras esperan.
Si se trata de una sala de espera o una recepción de oficina, lo ideal es que entonces se pongan sillas de confidentes o colectividades, pues será un ambiente que mezcle trabajo y espera, más corporativo.


La iluminación es otro factor a tener en cuenta. Una sala de espera óptima debe tener la iluminación adecuada, ni pasarse ni quedarse corta y oscura.
En muchos casos la sala de espera del negocio debe abogar por la relajación del cliente, por lo que la luz debe de ser la justa para que no sea una sala a oscuras pero que tampoco deslumbre. Es mejor apostar por luces cálidas y led para ahorrar energía y presupuesto.
Se puede jugar a meter un poco de color en la iluminación que vaya acorde con los colores empresariales para darle un toque personalizado.

Y por último, pero no menos importante, ¡la decoración! No se puede dejar la sala descuidada, es la primera impresión de la empresa o negocio, por lo que los detalles importan mucho.
Mesitas con revistas o periódicos, una pequeña zona con sillas y mesas infantiles para los padres que acudan con los peques (si el espacio lo permite), algunas plantas, cuadros, fotografías o letreros con mensajes graciosos o motivadores que tengan que ver con la labor desempeñada. Sin que quede demasiado recargado, solo dar unas pinceladas.
¿Y si la sala de espera no puede estar al principio?
Si por cuestiones del local no se puede poner a la entrada, una solución es montar un mostrador de recepción en la entrada para que cuando entren los clientes haya alguien que les reciba y ya desde allí indicar dónde está la sala de espera.
Una zona de recepción nada más entrar a la empresa es habitual y aunque sea pequeña, con solo un mostrador y la silla del trabajador o trabajadora que atienda, hay que tenerla igual de cuidada que la sala de espera.


En Iberdeco contamos con todo el mobiliario necesario para montar una sala de espera óptima y cuidada así como una zona de recepción. Muebles de calidad, con variedad de estilos y abanico de presupuestos para adaptarnos a todos los bolsillos.
Si tiene cualquier consulta, puede preguntarnos e intentaremos contestar lo antes posible.